jueves, 15 de diciembre de 2011

Lágrimas

Maldigo el dia proscrito,
en el que sin cesar,
brotaron en mis las amargas
duras aguas marchitas de mal.

Maldito dia que en huella,
dejaron tristeza en mi afán,
de tener una conciencia
serena y firme como un pedestal.

Estúpido ahora me siento! En ese día regar,
con mis lágrimas asuntos que no debería tratar.
Y ahora, coincidencias, a mi me demostrarán
que era mejor el reírme, que no el tanto llorar.

Así que jugaste sucio, engañaste a los presentes,
marcaste un tímido augurio, quedasen tan sonrientes.
Miráseme yo mi alma, al encontrarte tan solo,
mentiras, y nunca verdades, demostrarme sin decoro.

Que gran honor el tuyo, maldita seas por siempre,
le digo a aquel que ya sabe, no lo dice, no lo siente.
No hay lágrimas en sus ojos, secaran un dia todas,
de extraños sucesos diurnos, a muy distantes horas.

Ahora veo mi error. Y que desafortunado hago,
escribiendo poesía, para aquellos que en su día, rieron y la apoyaron.
Y ya no me siento mal. Jugaste una buen apartida, pero habrás de recordar,
que el buen jugador de poker, cartas no apuesta al azar.

Si juega, en mano descubre, total la felicidad.
Pero nunca verás que arriesgue, con dos o tres cartas de más.
Si sale la reina de picas, poker seguro tendrás.
Si sale el joker restante, en las llamas arderás.
Y toda la fortuna, que en mal quiesieras sacar,
se ahogará en el barro, y no lo podrás ocultar.

Comprendo tu mundo, elegida.
Comprendo tus lloros, amor. 
Cupido lanza sus flechas, y todas, muy derechas,
impactan en el corazón.
La vida dolor nos infunde, y nosotros ansiamos placer,
pero a veces, consecuencias, nos matan y dejan de suceder.

Espero no llegue ese día. Por suerte soy hombre de leyes,
y violarlas no puedo, aunque, siendo consuelo, conocimiento de reyes,
tengo de todo un reino: sus campos, arados quedan, mejor que todos den fruto,
que nos alimenten por días, hasta que quedemos difuntos.

Perdonar se perdona, pero ya nunca se olvida.
Lágrimas que un dia cayeron, nunca más caerán, nunca más...

...al menos, aún no, todavía. 

Y esa rosa marchita

Este fragmento de rosas, a alguien va dedicado,
nadie sabrá quien es. O quizás si, y estaré equivocado.
Causará malos augurios, con seguridad a mi persona, pero
espero que mi maldad, sea bondad, aqui, escrita en prosa.

Ahora empieza la historia. que puede ser muy real,
que esté pasando ahora mismo, es posible, quién sabe, quizás...
¿pero es un juego macabro, o una buena moraleja?
Escuchad mientras leéis, no esta muerta.. solo un poco vieja.

Y aunque lo anterior sea rima, absolutamente mal hecha,
significa que la memoria del todo no está maltrecha.

Bien, todo empezó hace poco. Andaba curioseando, en viejos libros de estantería,
cuando ví algo brillante, entre ellos, que salía.
Una rosa muy bella, de color rojo infinita, con un tallo muy verde, muy verde, y cargado de espinas.

Quedé prendado de ella, que belleza, que valía.
Pero curiosamente en mis manos, la rosa envejecía.
Su tallo se hacía negro, sus pétalos caían,
y así que pensé una cosa, guardarla, conservarla, que así un bien hacia.

De cristal cubrí sus ojos, guardados en caja tenían, 
puse agua, no demasiada, para que alimentara su vida.
En una caja sin aire, para quedar protegida,
y que nada la dañase, para contemplarla viva.

Encontré en dos baúles, dos muñecas descosidas.
La una de un caballero andante, lo otra, de una princesa bellísima.
La del caballero destrozada, por los tiempos que tenía,
La de la princesa sólo un descosido había.

Al lado de la caja, de la rosa tenida, dejé cada muñeca, a su diestra y siniestra unidas,
como guardianes protectores de la caja de valía.

Y las conservé por años, hasta que un buen día...
Mis nietos jugaron con ellas, pobres, y allí morirían.
El muñeco andante roto, quemado por varias partes,
la princesa por la mitad quebrada, sin hilos ni hebras de antes.
Y la caja de la rosa, rota y con ésta fuera, muriendo la rosa con el tiempo,
la rosa que un día fué bella.

Custodio, amigo del tiempo, espero que comprendas mi hostoria.
Lo mejor y lo peor se conserva, aún habiendo guerras y glorias.
Pero si hay algo cuidado, y ese algo no se riega,
se pudre, y se envenena, hasta que alguien lo siega.

A tí rosa espinada, cuidarte es necesario,
si aire entra en la caja, te mueres
si no hay agua, marchitas,
si no hay luz envenenas,
si no hay cuidados, axhalas, tu último aliento levitas.

A ti caballero andante, dolor te ha hecho la vida,
eres la viva prueba, del paso del tiempo en dolor,
pero por proteger a tu amor,
envenenarías tu alma.
Eres sin duda el custodio, mejor custodio de la caja,

A ti princesilla de cuento, te atan cabellos dorados,
mis nietos los han esparcido, ya quedarán olvidados.
No te preocupes tanto, eres de la realeza,
te sustituirán muy pronto, sin prisas, pero sin pereza.

Hablar que hablar que se habla,
sentir que siente vivo,
de historias que llenan el alma,
hasta aquí hoy quedase escrito.

Espero que hayáis comprendido,
o no entendáis nada de nada,
mejor sea así lo segundo, 
pues si lo primero fecundo,
mi vida quizás, no, quizás no, será defraudada.

Finale

Hoy es el dia trágico.
Dia de lamentar, de perder, de caer,
de no poder levantar.

Hoy ya me he dado cuenta, de que nada puedo intentar,
que por mucho que lo rescate, por mucho... lo vuelven a atrapar.

Y bien que fué todo un sueño. La rosa lo habla claro,
espinas tiene en su tallo, y rojos son sus anhelos.
Aquel que erguido anda, sujeta, rosa de los cuatro vientos.
Calma en su mirada fluye, alma de línea blanca y fuego.

Sus vestiduras son claras, ahora caigo en la cuenta.
Oscuridad tu no hallas, no la hay, nadie la inventa.
Es de color claro y calla, independiente, lo vive, y que nadie más lo sienta.
Sus adentros son suyos, y sólo los elegidos, los verán con luz muy cierta.

Aquel que dios lo era, bajó de las alturas, coronó la tierra humana, 
y de forma muy serena, demostró que dios no era. Toda invención pereciera.

Al que me escucha, al que me lee, implorando perdon no quisiera.
Pero ya nada más puedo hacer, más de sombras oscuras llena mi alma queda.

Os rindo este homenaje, porque no hay otro más grande.
Con versos de poesía, escritos con todo el arte.
Ojalá, lector o lectora, sepáis apreciarlo si cabe.

Yo seguiré escribiendo. De eso, no dudéis.
Y creando palabras vacias, hasta que alguien las aprecie.
Ojalá nunca, pero quizás siempre. 

Renacimiento

Renacimiento. Vover a nacer.
Volver al origen, a lo que fue, a lo que es.

Bajo la sombra del tiempo busco tu halo.
¿Quien eres? ¿Que es?
El entendimiento no es la clave, esta vez no lo es.
La verdad se halla escrita, es todo y nada, cambio y perfección, al revés.

Verdadero, como las raíces que brotan en mi espalda.
Oscuro como mi sombrío parecer. Ténue, seguro, brillante.
Pero no decide, no juzga, sólo... sólo observa.

Mis ojos sólo son reflejo de mi alma. No hay que ver más allá.
Ante mis manos, el devenido fluir del tiempo, deslizándose cual hilo de coser.
Ante mi cuerpo, el dios oscuro del cambio, o del eterno mantener.
Ante mi alma, sólo oscuridad. Aunque, no sola, más con exergórica luz.

Pensamientos que se suscitan en el aire. No hay más, no hay nada que explicar.

Mirad... mirad... y entenderéis.

Impresionismo

De alta y pura nobleza,
carruaje muy selecto, y furia caballeriza,
se conoce al caballero.


De día, noble burgués, de educación refinada,
de noche, animal alado, de cuerpo y alma espinada,
y negras brillantes alas.

¿Quién le conoce muy bien?

Nadie sabe, nadie nada.
No le conocen exacto, sólo inventan y hablan;
No lo conocen seguro, más no por vestir oscuro,
anda llena de oscuridad su alma.


Su mirada es muy clara. No espera, no vaga.
Directa te llega al alma. Como paloma blanca.
Sale de noche de caza, hay que buscar alimento.
Detrás de la noble figura, de tela oscura y tormento,
luce caballeroso amigo, confianza ciega, amistad, atento.

Todos lo llaman raro, nadie lo ve correcto.

Así lo ven todos, yo lo veo como un cuervo.

sábado, 26 de noviembre de 2011

Encuentro

- Pasó mucho tiempo, más del necesario... Quizás, nunca debimos dejar pasar tanto...
- Es verdad.¿ Pero que importa? El tiempo es curvo, y tenemos la habilidad de manejarlo a placer. Mientras esto exista, no nos importa en absoluto. Dejémoslo pasar...
- Esto que tenemos será eterno... ha de serlo. Por mí y por tí. Por nuestro proyecto en común. Por siempre.
-  Para siempre.

Dichosos los que encontraron a su propia felicidad. Y que supieron mantenerla.
Dichosos los que poseen lazos eternos. Lazos de unión infinita.
El momento ha llegado. Y mi tiempo... termina.

Mi función está terminando por fín.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Renacimiento del alma

Renacimiento. Vover a nacer.
Volver al origen, a lo que fue, a lo que es.

Bajo la sombre del tiempo busco tu halo.
¿Quien eres? ¿Que es?
El entendimiento no es la clave, esta vez no lo es.
La verdad se halla escrita, es todo y nada, cambio y perfección, al revés.

Verdadero, como las raíces que brotan en mi espalda.
Oscuro como mi sombrío parecer. Ténue, seguro, brillante.
Pero no decide, no juzga, sólo... sólo observa.

Mis ojos sólo son reflejo de mi alma. No hay que ver más allá.
Ante mis manos, el devenido fluir del tiempo, deslizándose cual hilo de coser.
Ante mi cuerpo, el dios oscuro del cambio, o del eterno mantener.
Ante mi alma, sólo oscuridad. Aunque, no sola, más con exergórica luz.

Pensamientos que se suscitan en el aire. No hay más, no hay nada que explicar.

Mirad... mirad... y entenderéis.